El Vínculo, una serie radial fantástica
Por: Ana Laura Rodríguez González
Una de las opiniones más arraigadas que poseen las nuevas generaciones es: la radio es un medio obsoleto, cualquier contenido de entretenimiento posible e inimaginable ya existe en Internet de forma audiovisual, las piezas exclusivamente sonoras no son tan estimulantes. Una concepción errónea, pues esta “limitación” apela aún más a nuestra creatividad, obliga a crear imágenes en nuestra mente para darle esa dimensión visual faltante, dota al interlocutor de un papel más activo en la construcción de la historia.
Otro parlamento de gran referencia es: los programas radiales, dramatizados específicamente, no están a tono con los tiempos actuales y los asuntos de interés para los jóvenes, como es la inclusión a los miembros de la comunidad LGBTQ+. En este sentido, la radio como medio de comunicación y divulgación existe en nuestro país desde hace más de un siglo, tiene que adaptarse e incorporar a sus guiones todos los cambios sociopolíticos y culturales ocurridos desde entonces, continuamente.
Prueba de ello es la serie “El Vínculo”, realizada por la CMKO Radio Angulo y escrita por Dianelis Remedios Gorra. En su argumento convergen las dinámicas sociales del día a día: amor, desamor, muerte, amistad; es en sus protagonistas donde se rompe el molde, ya que son criaturas fantásticas: sirenas, elfos, vampiros, etc, los cuales transitan todo el espectro de orientaciones sexuales.
Nos situamos en la dimensión Nealaria. Sus habitantes conviven pacíficamente, ocultos de los humanos y bajo la jerarquía de un consejo supremo. El Vínculo es una conexión profunda y mística entre dos criaturas, les permite comunicarse mentalmente, e incluso fusionar sus poderes mágicos. ¿Qué pasaría entonces si el líder del clan de los hombres-lobo y la bruja más poderosa se vincularan? ¿Cómo actuaría la cabeza del consejo, casado con esta bruja?
No es la primera vez que se realiza una serie de este género en la emisora, en el espacio habitual de aventuras ya se intentó hace algunos años, pero dicho espacio en la actualidad estaba desatendido. Dayana Agüero tuvo la idea de retomarlo, luego de que Natalia Díaz (directora de la CMKO) aprobara el proyecto.
Los actores estuvieron más que dispuestos desde el primer momento, atraídos por la oportunidad de hacer algo diferente para los jóvenes. Mediante la creación de un canal en Telegram pudieron intercambiar con los oyentes y recibir sus apreciaciones para mejorar las actuaciones y el diseño sonoro, una manera muy eficaz de afianzar esa comunicación tan necesaria entre el creador y el público.
Todos los capítulos están disponibles en este canal de Telegram, del mismo nombre de la serie.
“En el caso de la acogida creo que ha tenido buena recepción. Alguien le confesó a Cesar Hidalgo (Einar): la fantasía llevada a la TV me resulta molesta porque sé que es maquillaje, pero con esta serie puedo ver a los personajes. Esa es la magia… Escuché decir: la radio es teatro para ciegos. Se habla mucho de la psicología del color, pero se olvida al sonido como característica importantísima para el audiovisual. A una película de terror le quitas el sonido y no vas a tener miedo. La experiencia del espectador depende en gran medida de la banda sonora del audiovisual. En el caso de la radio… es sonido para ver”, defiende la escritora.
La era actual de sobreestimulación visual (consumir diariamente colores brillantes en una pantalla pequeña) ha conducido a una supremacía de la imagen. Condena todo entretenimiento que carezca de la misma y a quien, por una u otra razón, no pueda disfrutar de ella. Esta idea de la radio como teatro para ciegos pone en valor su cualidad de fácil acceso, no solo para personas invidentes, sino de cualquier edad y cualquier estatus que los impida de tener acceso a Internet. Previo a la popularización de las redes, las historias eran contadas vía oral. Universos completos se edificaban en las voces de otras personas y sus capacidades para imitar los sonidos de la naturaleza, las máquinas o los animales. La radio aún es definida por la oratoria.
Uno de los objetivos era crear un producto nacional en un contexto, y para un público, que está acostumbrado a buscar directamente en lo internacional. Sin embargo, todavía no se logra establecer el lazo constante con los radioyentes juveniles.
“Creo que la radio sí está hablando de las situaciones actuales de los jóvenes, de hecho, la serie anterior a El Vínculo, El Documental, está basada en experiencias de adolescentes. La escritora Dayana Agüero hizo un trabajo de investigación increíble para las 2 temporadas que ya tiene El Documental. No obstante, se hace más, lo que sucede es que el trabajo de promoción para que los jóvenes que escuchan la radio y se vean reflejados no existe prácticamente. Hacemos contenido para ellos y no lo escuchan. Prefieren conectarse a Facebook, Instagram, etc.”
La radio es sin dudas un ente vivo; queda de parte del público buscar los espacios que más se adapten a sus gustos e inquietudes. Esta serie en particular cuenta con un diverso equipo de trabajo, conformado por profesionales de diferentes edades. “El Vínculo” es una opción más para los ya conocedores del medio y para los recién entrenados en esa capacidad de “ver el sonido”.
